06/12/10 Celebrities: Hoy…la lechuga de Adelaide

Mi ambición en la vida es no hacer nada, comer donuts y seguir trabajando como técnico en la Central Nuclear de Springfield. Hoy soy Homer Simpson en la clase de inglés, y mi primera inspiración para llegar a ser una estrella de la televisión como dibujo animado fue Micky Mouse. Una parte de la clase somos famosos y la otra parte son periodistas que tienen que adivinar quienes somos haciéndonos solo 6 preguntas. La periodista que me ha tocado para adivinar mi personaje es una señora de más de 60 años que se llama Eva, nació en Hungría y resulta que es una arquitecta retirada, famosa en su país, o eso al menos es lo que nos ha dicho a todos. A la quinta pregunta su intuición le lleva a pensar que soy ,o bien Barack Obama o Ghandi. En la sexta pregunta sus ojos azules me miran con picardía y salta: “Tú no eres un hombre, tu eres esa actriz de los labios gordos”, se ríe pensando que me ha desenmascarado, pero en realidad Angelina Jolie la ha elegido mi compañero italiano Fabio. Omar se queda de nuevo con Cristiano Ronaldo e intentan conquistar a Angelina Jolie a espaldas de Brad Pitt, que seguro está en otra clase construyendo maquetas de edificios históricos del mundo: Hoy, la Torre Eiffel.

El desvarío de famosos en clase de inglés seguro que tiene algo que ver con las lechugas que comemos en Adelaide. Lo digo porque deben cultivarse con agua que viene de algún río con vertidos nucleares. No estaba acostumbrado a ver las raíces en una lechuga que venden en un supermercado, ni tampoco estaba acostumbrado a comer lechuga que realmente sepa a lechuga. En Barcelona las lechugas no saben a nada.

Noticias desde España: Otra noticia sensacionalista. Un enfermero de Olot que se dedica a matar enfermos para “liberarlos de sus problemas”, haciendo que beban productos de limpieza, sobredosis de insulina o mezclas mortales de medicamentos.

Con éste ilustrado libro bilingüe me dedico a aprender un poco más de vocabulario en inglés. Para que veáis que los tópicos españoles están también bien arraigados en Australia.

 

Nada mejor para cenar que una ensalada de lechuga radioactiva, acompañada de tomates que saben a tomate, aceite de oliva que no sabe al 100% a aceite de oliva, orégano y sal. Son las 22:45 de la noche en Adelaide y en Springfield (USA) todavía son las 04:45 am y allí recogerán las lechugas radioactivas que nos comeremos pasado mañana Lorena y yo.