24/10/10 Domingo verde en Adelaide

Resulta que los ciudadanos de Adelaide (adelaidanos o adelienses o adeladinos, todavía no sabemos su gentilicio), son gente muy sostenible con el medio ambiente. Son muy verdes. Y este primer domingo de paseo por  la ciudad  nos encontramos con una especie de festival sostenible en donde familias con sus niños van en bicicleta, pasean, cantan o simplemente miran lo que los demás hacen. 

Estando fuera de España, las 13:00 ya es una buena hora para comer, y más teniendo en cuenta que todavía colea el Jet Lag dentro nuestro, el cual hace despertarse a las 2:00 de la madrugada y ver películas sobre aborígenes conquistados por blancos, anuncios de tele tienda en donde con una cuerda colgada en cualquier puerta de casa tu cuerpo parece el de un culturista preparándose para míster universo o clásicos del cine como Tiburón para que sepas cómo matar a uno de ellos por si te lo encuentras en alguna playa australiana; lo malo es que necesitas llevar contigo una botella de aire comprimido, un rifle y conseguir que justo en el momento que el tiburón abra la boca para comerte, tú le dispares a la botella de aire que previamente has conseguido meter en su boca y luego disparar exactamente allí para que el tiburón blanco malo explote y tú te salves… O sea, que no mola nada eso de estar todavía con Jet Lag.

Y si es malo el Jet Lag, la comida más barata que nos encontramos por la zona de la fiesta de la sostenibilidad es la del barrio chino. Estos son, posiblemente los últimos Noodles con gambas o arroz con cerdo agridulce que nos comeremos en mucho tiempo. Nunca quisimos tanto encontrar un McDonald´s cerca de nosotros.

El paseo de después de la última comida se termina en éste parque SOLO para niños.

 

No sé qué hora es ahora mismo en Adelaide, pero seguro que son 8 horas y media menos en España.